Entre nubes de algodón

En la obra de teatro “El día que nació Isaac”, dos amigos de adolescencia, Nacho (Félix Gómez, que estrena talento también como productor de la obra) y Denis (un Ricard Sales potente en interpretación y presencia) se reencuentran años después e intentan retomar su amistad, involucrando a sus respectivas parejas, Marta (Diana Palazón que se va ganando al público pese a su falta de proyección vocal) y Carmen (la menos conocida pero impactante, Cynthia Martín).

Cuatro personas, como todos las conocemos, arquetipos de la actualidad. La familiaridad con ellos nos ayudan a destapar sus carencias, sus traumas y acompañarles en el camino de la liberación personal. Muchos podemos encontrarnos en algún rincón de este escenario, entre muebles de diseño sueco y el improvisado caos de manchas coloridas.

La mujer progre, la asustada conservadora, el artista narcisista y el bonachón armarizado, atrapados entre rutinas y patrones sociales (o la negación de los mismos), anhelando amor y sensaciones, buscando la vida cuyo pulso perdieron o nunca poseyeron. Hasta ahí como la vida misma.

Lo sorprendente viene, cuando – y para eso es teatro y no la realidad – el sueño mojado de la adolescencia se cumple y el amigo deseado se baja los pantalones, cuando la esposa ni levanta la voz al revelarse la auténtica inclinación sexual de su marido y el perdón sale más fácil que en el confesionario de una iglesia.

Eso si, antes de levantarnos de los acolchados sillones del fantástico Teatro Fernando Fernán Gómez, donde solo molestan los rugidos de los monopatines de la Plaza Colón, y mandarnos de vuelta a la vida real donde el proceso de liberación de traumas juveniles y modelos de vida incrustados es doloroso y deja huella, nos despiden con una imagen esperanzadora para una sociedad que avanza.

¿Cuál es? Pues, no puedo contarlo todo…

Frieder Egermann