‘La muerte no huele a nada’ se ha convertido en una de las novedades literarias mejor valoradas por la crítica. ¿Cómo ha sido la reacción de los lectores hasta el momento?

Muy buena. He recibido comentarios muy positivos y que coinciden en valorar los mismos aspectos. Además, gracias a estos comentarios he podido confirmar que he logrado el que era uno de mis objetivos iniciales: crear una conexión con el lector y hacerle sentir intensamente en todo momento. Porque al final, mi propuesta es que quien se asome a ‘La muerte no huele a nada’ se meta en la piel del narrador hasta tal punto que sienta lo mismo que él al cien por cien.

¿Cuántos meses de embarazo han pasado desde que comenzó a redactar la novela hasta que finalmente vio la luz?

Tardé algo más de un año y medio. Fue un proceso largo y laborioso, con muchas horas de lectura y reescritura hasta llegar al texto definitivo.

Recientemente fue entrevistado por Frecuencia Gay. En dicha entrevista, expresó que había ido a un taller literario antes de redactar el libro. ¿Qué dudas le fueron surgiendo mientras redactaba la historia?

Dudas muchas y de todo tipo. Pero en eso consiste parte del proceso creativo: en tener dudas y en darle vueltas a ver la mejor manera de solucionarlas. Yo tenía muy claro cuál era la historia que quería contar. Sabía perfectamente el principio y el final, pero necesitaba rellenar las casi doscientas páginas que ahora hay en medio. El taller, que lo hice en Fuentetaja, me ayudó mucho a encontrar mi propia voz, a sacar lo que llevaba dentro y a establecer una disciplina de trabajo. Fue una experiencia en la que aprendí muchísimo, tanto del profesor, Alfonso Férnandez Burgos, como del resto de compañeros. Estoy muy agradecido.

El libro cuenta con una gran habilidad para sumergir a los lectores en la historia que se está contando. Llegan a surgir dudas en torno a lo que es ficción y lo que no. ¿Qué límites recomienda a quien vaya a leer el libro para distinguir entre la realidad y la ficción dentro de ‘La muerte no huele a nada’?

Recomiendo que no haya límites. La novela está contada desde la verdad, aunque no desde la realidad. Hay que estar dispuesto a sentir venga lo que venga de forma valiente. Los sentimientos que se transmiten en la novela se convierten en reales en el preciso momento en el que se cuelan dentro de la persona. Y eso es lo que importa.

El protagonista de la novela se arrepintió de introducir el nombre de su ex pareja en Google, ya que con ello se enteró de la muerte del mismo. Tras la historia que comienza en ese momento, y después de despejar las dudas, ¿cree que el protagonista realmente se arrepiente de buscar el nombre de su ex pareja en el buscador de Internet?

En absoluto. Joan Manuel Serrat dice en ‘Sinceramente tuyo’ que “nunca es triste la verdad, lo que no tiene es remedio”. Y esa frase muestra muy bien parte de la clave de la historia que vive el protagonista. La realidad es la que es, la conozcamos o no, y tarde o temprano acaba apareciendo. Al narrador le ocurre algo que hace que esa mañana introduzca el nombre de su ex pareja en Google. La vida es así. Las cosas simplemente ocurren. Arrepentirse no tiene demasiado sentido.

La novela hace partícipe al lector de los miedos que surgen en torno al sida. El protagonista confió en su pareja, pero dicha pareja no le había comentado nada al respecto… a veces se subestima la seguridad creyendo que no pasará nada… ¿Cree que el libro también realiza una importante función didáctica acerca de la prevención contra las enfermedades de transmisión sexual?

En cierto modo sí que cumple esa función, aunque de forma indirecta. El sida y la prevención, o la falta de ella, son elementos que, como otros, sirven para contextualizar la historia de los personajes. Los protagonistas indiscutibles de la novela son el amor y la muerte, y el miedo que va unido a ellos. Eso sí, si de forma no buscada, el texto contribuye a esa concienciación frente al VIH, bienvenido sea, por supuesto que sí.

Además, lo que ocurre en la novela no es necesariamente que la pareja no le hubiese contado al protagonista. Quizás, él tampoco lo sabía. En cualquier caso, la responsabilidad de la protección siempre es propia y no del que tenemos enfrente. Muchas veces se cree que el amor evita la transmisión, pero eso no es así. Lo único que protege es el sexo sensato.

La relación de pareja de los protagonistas abarca las dudas, el miedo, el sexo e incluso la idealización inicial de la otra persona. ¿Cómo definiría la relación de los protagonistas de ‘La muerte no huele a nada’?

Como una relación obsesiva y tal vez bastante inmadura. Aunque prefiero que sea el lector quien saque sus propias conclusiones.

El pasado viernes 20 de mayo presentó en Madrid su primera novela. El acto tuvo un gran éxito de público, con más de 80 asistentes. ¿Cómo ha vivido y valorado todo lo sucedido desde que comenzara la impresión del libro hasta el momento?

Lo estoy saboreando y disfrutando al máximo. Todo esto, en cierto modo, me pilla de sorpresa. Aunque desde hace algunos meses ya sabía que Gens Ediciones había decidido publicar la novela, cada vez que afronto algo nuevo de este proceso vuelvo a sentir la misma emoción. Hace unos días fui a La Casa del Libro de Gran Vía y me encontré con que “La muerte no huele a nada” estaba en la mesa de novedades de autores españoles e hispanoamericanos, junto a escritores como Elvira Lindo o Rosa Montero. No puedo describirte la sensación. Es impresionante.

Pero sobre todo, lo mejor es ver la reacción de la gente. Tanto de personas que conoces, como de las que no. Llevo semanas diciendo “gracias” una media de 30 veces al día. Y aun así, me parece poco.

Usted estará presente el próximo 10 de junio, de 19:00 a 21:00 horas, en la Feria del Libro de Madrid, firmando ejemplares de su novela. ¿Qué le diría a los lectores para que se acerquen a la caseta 121 de la Feria?

Sí, cierto. En la caseta de la librería Tres Rosas Amarillas. Pues les diría que si son lectores valientes, que no duden en venir y hacerse con un ejemplar, porque sentir es de las mejores cosas que hay en la vida. Y si es leyendo, mucho mejor.

Para terminar, ¿hay algo que no se haya mencionado en la entrevista y que le gustaría dar a conocer a los lectores?

Me gustaría hacer una mención especial a la ilustración de la cubierta, autoría de Ismael Álvarez, artista y amigo, que ha sabido reflejar a la perfección la esencia de la novela.

También quiero daros las gracias a ti, Alexander, y a Universo Gay, por este apoyo que me estáis dando. Muchísimas gracias a todo el equipo.

Muchas gracias por contestar a nuestras preguntas. Seguiremos atentos al éxito que siga cosechando ‘La muerte no huele a nada’.

Por:Alexander Rocha/www.universogay.com

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