Que Antonia San Juan es una buena actriz, ya lo sabiamos. De hecho lo sabe mucha gente, a tenor del lleno que habia el dia que fui a verla a Arteria Paralel (raro nombre, por cierto, para un teatro)

Diria que es, incluso, muy buena. Y el espectáculo que presenta lo demuestra con creces.

Como dice en el programa de mano, son monólogos de sus años de «one woman show» a lo largo y ancho de España y Europa. Lo cual nos demuestra que en esto del monólogo, Antonia está más que bregada y que, en cuestiones de meterse al público en el bolsillo tiene ya varias matriculas de honor.

Una permanente carcajada que no se interrumpe, se instala en el patio de butacas en cuanto aparece en el escenario.

Lo cual quiere decir que, si quieren reir, deben ir a verla obligatoriamente.

Pero…

Yo quisiera pedirle a Antonia que esos monólogos, pedazos de otros espectaculos, no nos fuesen dados de la forma en que lo hace, simplemente enlazados unos con otros por un oscuro en el escenario y un posterior cambio de luces.

Su galeria de personajes femeninos quizas merecia una reescritura que no los dejase en simples flashes, meras ilustraciones.

Y más, cuando al final del monólogo de la moderna tranquila, relajada y llena de buenas vibraciones nos muestra lo que el personaje oculta y la escena se oscurece, se dramatiza y deja al público con la risa helada en su cara.

¿Porque no más de esa Antonia, magnifica y entrañable en su desesperación?

Al final de su espectaculo y ante las abundantes ovaciones, Antonia San Juan nos ofreció un adelanto de su proximo trabajo.

Y quizás haga un juicio un poco temerario si digo que me pareció como la continuación de lo que acababamos de ver.

Y no. Yo quisiera ver a Antonia provocando la risa como sabe hacerlo, pero poniendo serio al respetable en un momento, como me demostró que tambien sabe hacerlo.

Espero algo asi de ella.

Y tambien espero que se ria tambien con el público y mantenga esa entrañable complicidad de quien ya lo sabe todo del «tu a tu» desde el escenario.

Y además, que nos regale la vista con su corte de pelo y su vestido negro de David Delfín

Por:José Massagué

www.antonia sanjuan.com