Stanyle Ntagali, un religioso africano que ha sido nombrado recientemente arzobispo en Uganda, se ha pronunciado en contra de las relaciones homosexuales poco después de asumir su nuevo cargo.

Ntagali fue elegido como nuevo arzobispo por parte de la Iglesia Anglicana de Uganda, la cual cuenta como miembros a distintos religiosos que han presionado en los últimos años para que el país africano condene las relaciones homosexuales con la pena de muerte.

El nuevo arzobispo ugandés ha manifestado tras asumir el cargo que las relaciones sexuales entre personas del mismo sexo son «totalmente inaceptables», aunque ha preferido distanciarse de las peticiones de otros miembros de la Iglesia Anglicana de Uganda de condenar las relaciones homosexuales con la pena de muerte.

El religioso africano ha manifestado, en dicho sentido, que Uganda no debe condenar en ningún momento a los ciudadanos homosexuales con la pena de muerte, aunque pidiendo que pese a ello, las relaciones homosexuales continúen siendo rechazadas socialmente.

El nuevo arzobispo expresó en el año 2009 que «la homosexualidad es un gran problema en África. No estamos de acuerdo con nuestros hermanos de Inglaterra y Estados Unidos, los cuales ordenan a homosexuales como sacerdotes».